Kilbeggan

Kilbeggan se destaca como un whisky irlandés fuera de lo común al optar por una doble destilación en lugar de la triple, que sería la más común. Su singularidad se manifiesta también en su proceso de maduración; una vez mezclado con malta y grano, reposa en barriles previamente utilizados para bourbon, desarrollando su carácter durante un mínimo de 3 años.

Este whisky presenta una tonalidad dorada y brillante. Su fragancia es delicada y plena, con un toque sutil de ahumado y dulzura. Se distingue por sus matices de caramelo toffee, vainilla y frutos secos. En boca desencadena una explosión de tonos intensos que evocan frutas frescas y madera, acompañados de sutiles notas de miel, especias y un distintivo toque de cuero en el final.

Cómo tomar Kilbeggan

1. Highball (con agua tónica o ginger ale): crea un refrescante cóctel de alta calidad mezclando whisky con agua tónica o ginger ale. Agrega rodajas de limón o jengibre para una experiencia más aromática.

2. Whisky sour: mezcla el whisky con jarabe de azúcar, jugo de limón y clara de huevo para un sabor equilibrado y delicioso.

3. Maridaje con chocolate o frutos secos: combina este whisky con chocolate de alta calidad o frutos secos para realzar los sabores y crear una experiencia de maridaje única.

La destilería es una de las más antiguas de Irlanda, fundada en 1757, ha superado desafíos y celebrado éxitos. Cuando tiempos difíciles amenazaron, la comunidad se unió para preservar el amado whisky que dio vida al pueblo.

La destilería Cooley, liderada por John Teeling, rescató Kilbeggan en 2007, continuando la producción en Cooley pero finalizando la maduración en Kilbeggan a partir de 2014. Hoy, cada botella es un testimonio del inquebrantable espíritu de Kilbeggan.