Ribera del Duero Conde de San Cristóbal
Conde de San Cristóbal Crianza es un vino tinto multivarietal, elaborado con merlot, cabernet sauvignon y uva tinta fina mayoritariamente. Su crianza de 12-14 meses la pasa en barricas de roble francés, ruso (Cáucaso) y americano de diferentes tamaños y con diversos tostados, tanto ligeros como medios.
Tras una producción restringida que depende de la cosecha recogida y las uvas plantadas en su propia finca, en viñas no muy viejas, de entre 12-30 años, comenzarían con la vendimia. Una vez extraído el mosto pasarían a la fermentación maloláctica, realizada parcialmente en barricas de roble francés durante 9-12 días, para finalmente pasar a la maceración de unos 15-20 días.
Se trata de un vino de color rojo granate, limpio y cubierto. En nariz destacan los aromas más complejos, con toques muy profundos tostados y afrutados. En boca destaca la fruta madura y algunos toques a especias y cierta mineralidad. Un final amplio, fresco, potente, con buena integración de la madera de la barrica y muy elegante.
Ideal servirlo a una temperatura de servicio de unos 14 ºC, y como recomendación de maridaje, una buena caldereta de cordero con dátiles, te chuparás los dedos.
Bodega San Cristóbal
Junto a unos viñedos históricos y conocidos del siglo XVI estaría la bodega, ubicada en un lugar llamado Pago de Valdestremero, allí donde elaboraban vinos para el rey Felipe II cuando éste residía en Valladolid.
Un enclave único donde erigían las construcciones castellanas de la época, y que la bodega quiso homenajear al Conde de San Cristóbal de la Real Chancillería de Valladolid.
Sus fincas tienen una extensión de 80 hectáreas, cerca del conocido castillo de Peñafiel, en pleno centro de la Ribera del Duero. En sus campos recogen mayoritariamente la uva tinta fina, pero tienen múltiples parcelas independientes con un sólo tipo de variedad.
Luca del Mar –
Un vino muy elegante. Yo lo tomé con cochinillo lechal al horno y me parecio increible, recomendable cien por cien sin lugar a dudas.