Flor de Caña 7 a precio de escándalo
Flor de Caña 7 años es un ron de Nicaragua envejecido durante —lo que su propio nombre indica— 7 años antes en barricas de roble americano blanco antes de ser embotellado, todo un proceso natural y lento que le otorga al paladar un sabor suave y elegante, de cuerpo entero, ideal para tomarlo solo, con hielo, refrescos, soda o agua.
Conocido también como «Gran Reserva» o como Flor de Caña 7, este ron es muy conocido en el mundo de los rones. En Nicaragua está acreditado como el primer ron de exportación de todas las ediciones que ha comercializado la marca. El historial de este ron se remonta a 1992, siendo una de las empresas más conocidas que elaboran ron añejo negro, y en este caso, no cabe duda su elegancia, calidad y de gusto exquisito.
Prepara tu mojito con este ron Gran Reserva, así lo recomienda F. Paul Pacult, de Kindred Spirits, y es que si la noche es joven siempre es mejor tirar de los clásicos, cócteles refrescantes y mezclas exóticas.
Se trata de un ron de color caoba, con brillos dorados y oscuros. En el paladar se deja notar el cuerpo medio, con notas dulces, de caramelo negro, vainilla, higos y nueces tostadas, terminando con un toque a coco y notas tostadas y secas. En boca destacan las notas de chocolate negro, miel, terminando con un final largo y suave. Una maravilla que seducirá a los paladares más finos.
Historia de Flor de Caña
La aventura la comenzó un joven italiano (Génova) aventurero llamado Alfredo Francisco Pellas Canesa cuando, en 1875, emprende un viaje a Nicaragua para comenzar una nueva vida en el exótico país, sabiendo que dejaba atrás su familia y todas las comodidades del mundo.
Inicialmente, Alfresdo Francisco invirtió en una ruta de barcos que unía los océanos para transportar pasajeros y bienes de la costa de EE. UU. atravesando Nicaragua. La experiencia le sirvió de mucho, junto con otros acontecimientos que le servirían en futuros negocios.
Pero la creación del Flor de Caña comienza más tarde cuando, en 1890, cerca del volcán de San Cistóbal (Nicaragua), descubre el lugar perfecto para comenzar con el nuevo negocio y funda la destilería Flor de Caña. Y es que cerca de las temperaturas volcánicas encuentra las claves ideales para elaborar un ron con una suavidad tan especial.
Hoy, la empresa manifiesta su ilusión, pero también muchas dificultades a las que todas empresas se enfrentan por vivir cerca de una zona volcánica. Así lo cuentan sus responsables:
«A través de su historia, la marca, la compañía y la familia han vivido un accidente aéreo, confiscaciones, hiperinflaciones, incendios, huracanes, terremotos y erupciones volcánicas. A pesar de todas las adversidades, la empresa ha logrado mantenerse una empresa familiar: Solo 3 en 10 000 empresas familiares llegan hasta la 5ª generación».
Paquito Díaz –
Día a día e ha ido conquistando este ron que inicialmente no me atraía mucho. Ahora seguramente sea de mis favoritos. Y la verdad es que ningún premium lo puede envidiar
Piluca 77 –
Buenos, la verdad es que su dulzor no es excesivo y te deja desde el principio buen sbor de bocal Y además se ha quedado poco a poco como uno de los mejores rones sin ser cubano