Historia
La uva prieto picudo es una variedad autóctona de España, originaria de la región de Castilla y León, concretamente en las provincias de León y Zamora. Su cultivo se remonta a siglos atrás, siendo una cepa adaptada al clima extremo de la meseta norte, con inviernos rigurosos y veranos calurosos. Tradicionalmente, esta variedad se utilizaba para producir vinos locales, aunque en las últimas décadas ha ganado reconocimiento a nivel nacional e internacional gracias a la recuperación y valorización de las variedades autóctonas.
La denominación de origen de León, así como los V. T. de Castilla han sido clave en el desarrollo y promoción de la uva prieto picudo. Esta variedad ha pasado de ser poco conocida a convertirse en un emblema de la región, destacándose por la singularidad de sus vinos y su capacidad para ofrecer perfiles aromáticos únicos.
Características
La uva prieto picudo se distingue por su racimo compacto y sus bayas pequeñas, de forma ovalada y piel gruesa. Estas características permiten que resista bien las condiciones climáticas adversas y la hagan especialmente apta para el cultivo en secano.
En cuanto a sus propiedades organolépticas, esta variedad produce vinos con un color rojo intenso, alta acidez y una marcada estructura tánica. Los aromas suelen estar dominados por notas frutales, como cereza, frambuesa y fresa, junto con matices florales y especiados. Su versatilidad permite elaborar tanto vinos tintos como rosados, siendo estos últimos especialmente frescos y aromáticos.
Vendimia
La vendimia de la uva prieto picudo se realiza generalmente a finales de septiembre o principios de octubre, dependiendo de las condiciones climáticas del año. Dado que la uva tiene una piel gruesa y un racimo compacto, es importante seleccionar cuidadosamente los frutos para evitar la proliferación de enfermedades.
En muchas bodegas se opta por la vendimia manual, lo que permite una selección más precisa de las uvas y asegura la calidad del vino final. Además, esta variedad se utiliza en un método de vinificación característico llamado maceración carbónica, que intensifica los aromas frutales y florales en los vinos jóvenes.
Vinos
Los vinos elaborados con prieto picudo son variados y sorprendentes. En los tintos, se encuentran vinos de cuerpo medio a robusto, con una acidez refrescante y un perfil aromático dominado por frutos rojos y negros, junto con toques especiados y minerales. Envejecidos en barricas de roble, estos vinos desarrollan complejidad, integrando notas de vainilla, cacao y torrefactos.
Los rosados de prieto picudo son especialmente apreciados por su frescura y vivacidad. Suelen presentar colores vivos, desde el rosa pálido hasta tonos más intensos, y destacan por sus aromas a frutas frescas como fresa y frambuesa, con un final refrescante y equilibrado.
Bodegas
La uva prieto picudo es la protagonista en numerosas bodegas de Castilla y León. Entre las bodegas más reconocidas que trabajan con esta variedad se encuentran:
- Bodegas Tampesta: referente en la elaboración de vinos de prieto picudo, combina tradición y modernidad en sus procesos para ofrecer vinos de gran calidad.
- Bodegas Pardevalles: conocida por su compromiso con la calidad y la elaboración de vinos tintos y rosados de prieto picudo, respetando los métodos tradicionales.
- Bodegas Gordonzello: destaca por sus vinos modernos y expresivos, que capturan la esencia de esta variedad.
- Leyenda del Páramo: esta bodega se ha especializado en mostrar el potencial de la prieto picudo a través de vinos de alta gama.